La tradición y la historia del Casino de Madrid
En este post me gustaría hablaros de la conexión tradicional entre la cultura y los casinos. La cultura y el casino en el pasado lejano, durante el siglo pasado e incluso el siglo diecinueve, eran términos sinónimos y hoy día aún existen los casinos culturales que no tienen nada que ver con los casinos donde se juegan juegos de azar. El casino cultural en España tiene una historia muy interesante y tiene su origen en la propia cultura nacional desde el siglo XIX. Se trata de un grupo de gente de la clase alta con intereses comunes que crean un club o una sociedad cerrada para poder compartir ideas y socializarse con la gente de su misma clase social.
Es curioso por ejemplo descubrir que la historia del Casino de Madrid es muy interesante porque ha surgido primero como club social en un café de tertulia, llamado Café de Sólito, en 1836, cuando en esta época eran muy populares las reuniones de ciudadanos que tenían tertulias de tipo diferente. En estas tertulias participaban hombres de una misma clase social para debatir y compartir sus opiniones personales sobre temas como el arte, la política, la ciencia, etcétera. Así esta tradición española de mantener conversaciones después de comer, llamada tertulia, se convirtió en la actividad básica y natural en las cafeterías y salones de Madrid del siglo pasado.
Poco a poco la tertulia madrileña en el Café Sólito se convirtió en un local que ya tenía sus propios socios que visitaban el sitio para poder relajarse con sus conversaciones sobre temas actuales, tomando su café de la tarde y haciendo amigos nuevos en la sociedad. La primera vez que asignaron el nombre de “Casino” a este local, fue para denominar la tertulia en algo más inocente y evitar las sospechas del carácter político de las conversaciones en las que participaban miembros de la nobleza, los nuevos ricos de la burguesía y los militares de la clase alta. La palabra “casino” que es italiana y significaba “casa de campo” y sobre todo en aquella época era sinónimo de un lugar moderno.
Poco a poco el número de los socios de este casino aumentaba y por eso los propietarios del local buscaron otro más amplio y de mayor espacio en la calle del Príncipe, que incluso empezaron a llamar el local el Casino de la Calle del Príncipe. Unos años más tarde los socios que podían permitirse más lujo cambiaron el mobiliario que hasta entonces era el antiguo mobiliario del Café Sólito. En este nuevo ambiente lujoso empezaron a celebrar no solo reuniones de miembros ilustres de la alta sociedad, sino también actos sociales importantes. Entre los socios más conocidos del Casino eran los generales Diego de León y Leopoldo O’Donnell que entraron en la historia de España como iniciadores y participantes en la conspiración contra la regencia en 1841.
Sin embargo, los socios aumentan cada vez más, y se hace necesario cambiar de local de nuevo. Este tercer traslado se realiza en el Palacio del Marqués de Santiago y durante este período (del 1848 al 1880) el Casino se hace cada vez más popular y con mayor influencia política y social en la vida del país. El cuarto período (de 1880 al 1891) empieza con el traslado del Casino en el local del Café Suizo que tiene unas salas amplias y lujosas. El quinto traslado del Casino se hace en 1891 en el edificio La Equitativa y hasta 1902 este es el período de la guerra entre los Estados Unidos y España en Cuba.
El último traslado del Casino, el sexto, se hace en el 1910 en el edificio que conocemos actualmente en la calle Alcalá como el Casino de Madrid. En 1993 ha sido declarado como Bien de Interés Cultural y en la actualidad en este edificio emblemático se celebran congresos, visitas oficiales y otros eventos sociales. Desde 1998, ha sido inaugurado el restaurante “La Terraza del Casino”, con una Estrella Michelin y con una gastronomía exquisita que cuenta con Ferran Adriá como asesor gastronómico.